Socorro Gomes: En evidente contraste, Venezuela invita a la paz mientras Trump anuncia la guerra

Saturday, September 23, 2017

Entre los días 16 y 19 de septiembre, el pueblo venezolano organizó una importante acción de afirmación soberana, en la que los presentes de diversos países, representantes de organizaciones, asociaciones y movimientos sociales diversos, así como jefes de Estado, pudieron manifestar su apoyo y solidaridad al pueblo hermano de Venezuela en la aguerrida y sostenida resistencia contra la injerencia imperialista, contra la ofensiva de las fuerzas reaccionarias y oligárquicas y por la continuidad y profundización de la grandiosa Revolución Bolivariana.

El título del encuentro, Jornada Mundial "Todos somos Venezuela": Diálogos por la Paz, la Soberanía y la Democracia Bolivariana, fue un importante refuerzo del empeño de todas las fuerzas democráticas y progresistas en la contraposición a la descomunal guerra mediática de escala global contra un gobierno legítimamente elegido por el pueblo venezolano, una ofensiva ya conocida en la cartilla de la injerencia imperialista estadounidense para intentar imponer el cambio de régimen y derribar gobiernos que se atrevan a hacerle frente. Por eso, reafirmamos, como ya el Consejo Mundial de la Paz y diversos otros movimientos han hecho, nuestro apoyo al empeño por diálogo del pueblo venezolano, que no arrastra el pie de la lucha en la defensa de su soberanía y la democracia bolivariana.

Sabemos, con ya incontables evidencias, que la política hegemonista de Estados Unidos siempre ha mirado hacia nuestra América Latina y el Caribe desde los mapas donde calculan sus tácticas de dominación y explotación desde una lógica geoestratégica para elaborar formas de desestabilización e instalar gobiernos subordinados y dóciles como meros agentes para la entrega de sus países.

Hace casi dos décadas, desde la Patria de Simón Bolívar, el comandante Hugo Chávez Frías se atrevió a alzar la lucha del pueblo venezolano contra la sumisión de la nación. Se trata de una transformación histórica que arrojó las condiciones para el creciente enraizamiento de la Revolución Bolivariana, lo que garantizó que un proceso popular y nacional resistiera de forma vigorosa a intentos prácticamente incesantes de golpes de Estado y de desestabilización a lo largo de todos estos años.

En este período, las fuerzas democráticas y progresistas de todo el mundo y las que componen el Consejo Mundial de la Paz nunca relegaron su compromiso e inquebrantable solidaridad al pueblo venezolano. Al final, creemos que la defensa de la soberanía nacional y la autodeterminación de los pueblos, al lado de la no injerencia en los asuntos internos de las naciones y de la cooperación internacional, son los pilares que deben sostener un nuevo orden internacional liberado del imperialismo, en que cada nación pueda construir el proceso por el cual se emancipa.

Por eso, defendemos el derecho inalienable del pueblo venezolano de definir con qué instrumentos y tácticas deberá superar la grave crisis política y económica que se instaló, cultivada en el caldo de los intentos desestabilizadores de parte de la oposición y de las fuerzas reaccionarias, fascistas y violentas patrocinadas por el imperialismo que se benefician de la incesante guerra mediática contra el gobierno bolivariano del presidente Nicolás Maduro.

Saludamos enfáticamente las elecciones a la Asamblea Nacional Constituyente, que demuestran no sólo el compromiso con una salida democrática de esta crisis, sino también el empeño popular en avanzar en el proceso de transformación nacional, profundizando los compromisos de la Revolución Bolivariana. Reafirmamos, aún en la contraofensiva a la guerra mediática, que pocas naciones del mundo conocen tamaño esfuerzo democrático como lo demostrado a lo largo de esas casi dos décadas, en que el compromiso revolucionario fue constantemente refrendado por el pueblo.

En el otro lado, denunciamos enfáticamente el posicionamiento adoptado por el presidente estadounidense Donald Trump en la Asamblea General de las Naciones Unidas, dejando más claras las políticas beligerantes de este Estado y sus gravísimas amenazas a la paz internacional, ya reiteradamente minada por la política hegemonista y belicosa.
Trump hizo evidente intento de aterrorizar a todos los que no se inclinan ante sus chantajes, gritando, distribuyendo amenazas de sanciones económicas y el total aislamiento de Venezuela, Cuba, Corea del Sur y Irán, países ya víctimas rutinaria de los desmanes estadounidenses.

En un paroxismo de odio e imprudencia que a todos ataca y ofende, Trump pretende llevarnos a todos al borde de un conflicto bélico de proporciones y consecuencias inimaginables. La respuesta de los pueblos no puede ser otra que la intensificación de la lucha por el fin total de este orden basado en la fuerza bruta, inaugurando un nuevo orden mundial, donde impere el respeto entre las naciones, en que el diálogo sustituye a las armas en la resolución de las diferencias.

Por eso, al tiempo que manifestamos nuestra solidaridad al pueblo venezolano en el enfrentamiento a la crisis, la violencia y el reiterado intento de golpe, apelando por un apoyo internacional comprometido con el respeto a la soberanía venezolana, manifestamos también, desde cada fuerza que compone el Consejo Mundial de la Paz, nuestra confianza en la resistencia antiimperialista y en la defensa de la democracia bolivariana y de la paz, que seguirán contando con nuestra solidaridad y compromiso resueltos en esta lucha.

Socorro Gomes, presidenta del Consejo Mundial de la Paz